El secretario de Defensa de EE.UU., Lloyd Austin, confirmó este miércoles la existencia de “evidencias” sobre el envío de soldados norcoreanos a Rusia para combatir en la guerra contra Ucrania. Según informes de inteligencia de Corea del Sur, se estima que entre 1.500 y 12.000 tropas de Corea del Norte podrían estar en suelo ruso, lo que genera gran preocupación en la comunidad internacional. Un día antes, el presidente de Ucrania, Volodymyr Zelensky, había advertido sobre la posibilidad de que hasta 10.000 soldados norcoreanos se unieran a la contienda, lo que representaría un peligro serio tanto para Europa como para el Indo-Pacífico, según Austin.
🇺🇦🇷🇺🇰🇵🇰🇷 Norcoreanos por Rusia, surcoreanos por Kiev y miles de tropas adiestrándose con sus aliados en Ucrania.
◾️”El Servicio de Inteligencia Nacional de Corea del Sur (NIS) informó que Corea del Norte transfirió aproximadamente 1.500 fuerzas especiales norcoreanas al este de… pic.twitter.com/gn5hP7XwVD
— El Periódico de la Geopolítica (@delageopolitica) October 19, 2024
Este despliegue de tropas se suma a la entrega previa de armas norcoreanas a Rusia, acciones que Pyongyang y Moscú han intensificado en los últimos meses. Las fuentes surcoreanas también han revelado imágenes aéreas de las bases rusas donde las tropas norcoreanas estarían entrenando, particularmente en las regiones de Vladivostok, Ussuriysk y Khabarovsk.
Corea del Sur ha calificado esta situación como un “grave riesgo de seguridad”, con el presidente Yoon Suk-yeol instando a la comunidad internacional a tomar medidas enérgicas. Por otro lado, Valeriy Ryabykh, experto militar ucraniano, señaló que la integración de estas tropas en las líneas rusas podría enfrentar problemas por la falta de experiencia en combate reciente y las diferencias en los sistemas militares.
La alianza entre Rusia y Corea del Norte responde a intereses complementarios. Mientras Pyongyang busca fondos y tecnología, Moscú necesita soldados y municiones. Analistas afirman que Corea del Norte ha enviado más de 13.000 contenedores de armas a Rusia, incluidos millones de proyectiles y misiles. Este pacto militar fortalece la colaboración entre ambos países y agrava aún más el conflicto en Ucrania.