Guerra Rusia Ucrania, en medio de la creciente crisis bélica en Europa del Este, las autoridades ucranianas alertaron sobre una nueva fase en el conflicto con Rusia, caracterizada por una intensificación de los ataques aéreos y una inminente ofensiva rusa con misiles balísticos y de crucero. Según las autoridades, Moscú ha estado acumulando misiles durante meses, en previsión de un ataque masivo destinado a desestabilizar aún más al gobierno ucraniano.
El jefe del Centro contra la Desinformación del Consejo de Defensa y Seguridad Nacional de Ucrania, Andrí Kovalenko, confirmó que los misiles preparados por Rusia incluyen los poderosos Kh-101, Kalibr, así como misiles balísticos de largo alcance. Estos, junto con barcos y aviones de combate, están listos para ser desplegados en un ataque fulminante. “Es importante recordar que la acumulación de estos misiles no es una novedad, ya se ha informado sobre ello en ocasiones anteriores”, destacó Kovalenko, mientras la comunidad internacional observa atentamente los movimientos en la región.
Este escenario se enmarca en un contexto de ataques previos de gran magnitud, como el del pasado domingo, cuando Rusia lanzó un ataque masivo contra el sistema eléctrico ucraniano utilizando más de 120 misiles y 90 drones. Estos ataques han sido diseñados para desmantelar la infraestructura vital de Ucrania y mermar su capacidad de resistencia frente a la invasión.
La Respuesta de Ucrania: Misiles ATACMS y Escalada del Conflicto
Este martes, Ucrania tomó una decisión trascendental al lanzar por primera vez misiles balísticos ATACMS de fabricación estadounidense, después de recibir autorización de la Casa Blanca. Este movimiento representa un giro significativo en la estrategia del conflicto, ya que Kiev ahora tiene luz verde para atacar objetivos militares dentro de Rusia. Aunque Moscú había advertido que cualquier uso de estos misiles podría generar represalias contundentes, el gobierno de Ucrania ha considerado este paso como necesario para proteger su soberanía.
El Kremlin reaccionó rápidamente, acusando a Estados Unidos de avivar aún más las llamas del conflicto y de realizar un “engaño diplomático” al facilitar la entrega de armamento pesado a Ucrania. La administración de Joe Biden, que hasta ahora había mantenido una postura de apoyo sin comprometerse directamente con la escalada bélica, se encuentra en una posición delicada, a pocos meses de la transición presidencial.
La Embajada de EE. UU. Cierra y Refuerza Medidas de Seguridad
La embajada de Estados Unidos en Kiev, debido a la creciente amenaza de un ataque aéreo masivo, cerró temporalmente sus puertas y suspendió sus actividades. En un comunicado oficial, la legación diplomática indicó que, en respuesta a la información sobre un posible ataque aéreo “importante”, los empleados del consulado serían evacuados y se les instruyó para que tomaran refugio en lugares seguros. Esta acción pone de manifiesto el nivel de riesgo que enfrenta la ciudad, ya que las autoridades ucranianas y diplomáticas se preparan para lo peor.
A medida que el conflicto sigue su curso, se teme que los ataques aéreos rusos no solo afecten a las fuerzas militares ucranianas, sino que también impacten a la población civil, poniendo en peligro vidas inocentes en el proceso. La recomendación de la embajada de EE. UU. a los ciudadanos estadounidenses en Ucrania es estar preparados para buscar refugio inmediato en caso de alertas aéreas.
La Guerra en su Milésimo Día: Un Conflicto Sin Fin
El 20 de noviembre marcó el milésimo día de guerra en Ucrania, una cifra que resalta la duración y la devastación del conflicto. La comunidad internacional sigue dividida en cuanto a cómo resolver esta crisis, pero lo cierto es que el costo humano y material ha sido incalculable. A medida que las tensiones aumentan, la posibilidad de un conflicto de mayores dimensiones se vuelve más real, y las autoridades de Ucrania, junto con sus aliados occidentales, se preparan para cualquier escenario.
